Rana venenosa de Zimmermann – Ranitomeya variabilis
Rana venenosa de Zimmermann – Ranitomeya variabilis
La Ranitomeya variabilis, también llamada rana venenosa de Zimmermann, fue descrita por primera vez en 1988. Hasta el año 2001 esta especie se consideraba una con Ranitomeya ventrimaculata.
Ranitomeya variabilis pertenece a la familia Pendrobatidae, al igual que la peligrosa Phyllobates terribilis, por lo que es clasificable como rana flecha.
Esta especie también se conoce como rana venenosa de rayas amarillas y rana venenosa de espalda salpicada.
Ranitomeya variabilis puede confundirse fácilmente con Ranitomeya imitator.
Apariencia
La Ranitomeya variabilis es una rana venenosa muy pequeña. Los machos miden una media de 17,5 mm. Las hembras son ligeramente más grandes, con una longitud media de 18 mm.
El color del cuerpo es verdoso, desde el amarillo-verde en la parte delantera hasta el amarillo-azul en la trasera. El dorso de esta especie está cubierto de manchas oscuras que suelen ser ovaladas. Aunque hay especies de aspecto similar, es fácil reconocer la rana venenosa de Zimmermann. Es la única que tiene una mancha redonda y bien definida entre los ojos, justo encima de la nariz.
Las patas tienen manchas más pequeñas y son de un color diferente al del lomo del animal. El hocico es redondeado.
Los renacuajos de esta especie son oscuros, desde el gris hasta el marrón oscuro y el negro.
Hábitat
Esta especie vive en bosques secundarios de alto desarrollo, en elevaciones de nivel medio. La Ranitomeya variabilis se encuentra en altitudes entre 900 y 1.200 m sobre el nivel del mar.
Aunque este anfibio prefiere evidentemente los humedales y las charcas, su presencia no se limita a la existencia de fitoplancton o de una vegetación determinada.
Comportamiento y reproducción
La Ranitomeya variabilis es semiarborícola y vive principalmente en los árboles o en otros lugares por encima del nivel del suelo, pero también pasa tiempo en el suelo. Es un anfibio diurno, es decir, sólo activo durante el día.
Los machos utilizan su voz para atraer la atención de las hembras, colocándose en lo alto y emitiendo una llamada cada vez más fuerte a medida que la hembra se acerca.
Cuando la hembra acepta seguirle, el macho la lleva a un lugar de cría adecuado. La elección suele ser pequeños charcos de agua de lluvia recogidos de las plantas. La reproducción tiene lugar durante el día, preferentemente después de la lluvia.
La hembra pone de 2 a 6 huevos bajo la superficie del agua y el macho los fecunda simplemente pasando por encima. En otras ocasiones, la fecundación se produce durante la puesta de huevos. En este caso, el macho alinea sus genitales con los de la hembra, pero en sentido contrario.
Al cabo de unas dos semanas, los huevos eclosionan y dan lugar a renacuajos. El padre se encargará de los renacuajos, que llevará sobre su espalda a otro estanque de agua más grande. Cuanto más grande sea la piscina elegida por el padre, más nutrientes estarán disponibles para el desarrollo de los renacuajos. A la inversa, un grupo más grande significa una mayor posibilidad de ser presa.
A veces el mismo pozo de agua es compartido por renacuajos de diferentes padres y esto lleva a una selección natural de los más fuertes, que resisten el canibalismo que se desarrolla entre renacuajos no relacionados.
Veneno y síntomas
El veneno de Ranitomeya variabilis es la pumiliotoxina C, una versión menos potente del mismo tipo de toxina alcaloide segregada por otros Dendrobates y Oophaga.
La pumiliotoxina es segregada por la piel de la rana y sólo puede ser mortal en altas concentraciones. La rana venenosa de Zimmermannsólo tiene un cuarto de miligramo, mientras que se necesitan al menos dos miligramos para que sea letal. La toxina de esta especie es, por tanto, mucho más débil que la batracotoxina producida por Phyllobates terribilis.
Sin embargo, el veneno de estos anfibios es lo suficientemente potente como para causar problemas a los humanos. La pumiliotoxina afecta a los canales de calcio, interfiriendo en las contracciones del corazón y los músculos.
Los síntomas más comunes si se entra en contacto con Ranitomeya variabilis son la parálisis parcial, la dificultad de movimiento o, por el contrario, la hiperactividad. Si entra en contacto con más de una rana, y por tanto con mayores cantidades de veneno, puede morir.
Como todas las ranas venenosas, esta especie no es tóxica cuando se cría en cautividad. Esto sugiere que en la naturaleza produce su veneno a través de la alimentación.
Foto: Santiago Ron@Flickr
Alimentación
La rana venenosa de Zimmermannse alimenta de cualquier cosa que pueda cazar. Come arañas, mosquitos, grillos, saltamontes, escarabajos, pulgones, hormigas, ácaros y otros pequeños invertebrados.
Esta rana venenosa es capaz de comer presas incluso más grandes que ella.
Conservación
No tenemos información segura sobre el número de ejemplares existentes de esta especie. Por ello, no se considera en peligro de extinción y no está presente en ninguna zona protegida.
Sin embargo, se supone que la población de Ranitomeya variabilis está disminuyendo debido a la deforestación de su hábitat, al desarrollo de la agricultura y al comercio de estos animales, que a menudo les causa la muerte.
Difusión
La Ranitomeya variabilis vive en Colombia, Ecuador, Perú y Brasil.
Rana venenosa de Zimmermann – Ranitomeya variabilis